jueves, 2 de diciembre de 2010

De fuchurrunchinos y de pericotes



Estaban dos pericotes en la chanchulería comiendo guiso de agasajarnia con ajacacharras. A un costado un pesciforme se bandoneaba con las jarrinas al viento. Un fuchurrunchino se metió en el medio y con su espanciforme los desparranchó. Una gota de plagamarsa cayó de una marracachata y los pericotes salieron pincunciliando. Pasó un largo rato hasta que el fuchurrunchino se atrevió a pernigar las ajacacharras. Eran unas ajacacharras muy estribalentes. Para algunos pequetremientes esas ajacacharras eran impernigables; más feas que la puchurruclita.
Pero hubo un pericote que se atrevió a pernigarlas, y lo hizo con clase. Este pericote venía de Practalamia y conocía muy bien a las ajacacharras, tal vez porque era adicto a la agasajarnia. Pero no todo es color de chirimbote. Cuando parecía que las cosas se habían chiripleteado llegó la cocochiluna del fuchurrunchino. Era bastante achaflada. Tenía las piernas cuniformosas y los ojos del color del echenestuno.
Por cierto, el echenestuno era la flor preferida de los pericotes. Por eso en la chanchulería había varias precingentas con tierra llenas de santoritrípidos, chucupirrotes y por supuesto echenestunos. Dicen que por un gualicho, cuando los pericotes veían a la cocochiluna del fuchurrunchino, caían acachilados como pequetremientes. Sin embargo, aunque ella había apigoreteado con varios pericotes, ninguno era capaz de hacerla amontañear como lo hacía su cocochiluno.



2 comentarios:

Agostina Cánova Kuessner dijo...

"Pero no todo es color de chirimbote"
Jaja! Hace bastante que no te leía, y este texto me sacó una sonrisa. Definitivamente ge-ni-a-a-a-l!!
O quizá es la influencia de la música de fondo, que es para felicitarte también!
(felicito por la selección de la música, porque si bien hace mucho que no te veo, no creo que te hayas transformado en un señor negro que toca el piano, aunque todo es posible, y de ser así, avisame así a la presentación de BLA te llevo una corbata de regalo con la cara de Molko)

Szarlotka dijo...

Gracias Agostina. Para mí que fue la música de fondo que te dejó influenciar para bien.
No me transformé en nada, pero a Molko lo banco a muerte y me pondría una corbata con su cara (aunque ya estoy bastante vieja para esas cosas).